Cirugía Láser de Cálculos Renales
Una Solución Precisa y Mínimamente Invasiva
¿Qué es la cirugía láser de cálculos renales?
La cirugía láser de cálculos renales, también conocida como litotricia láser, es un procedimiento mínimamente invasivo utilizado para fragmentar y eliminar cálculos renales (piedras en el riñón) sin necesidad de cirugía abierta. A través de un pequeño instrumento llamado ureteroscopio, se introduce una fibra láser en el sistema urinario hasta llegar al cálculo. El láser emite energía que fragmenta la piedra en pequeñas partículas, las cuales pueden ser eliminadas a través de la orina.
¿Por qué se realiza la cirugía láser?
La cirugía láser se realiza para tratar los cálculos renales que causan dolor intenso, infecciones urinarias recurrentes, obstrucción del flujo urinario o daño al riñón. Esta técnica ofrece varias ventajas sobre otros métodos tradicionales:
- Menor dolor: La recuperación es generalmente más rápida y menos dolorosa en comparación con la cirugía abierta.
- Menor riesgo de complicaciones: Al ser un procedimiento mínimamente invasivo, el riesgo de complicaciones es menor.
- Hospitalización más corta: En muchos casos, los pacientes pueden regresar a casa el mismo día o al día siguiente de la cirugía.
- Mayor precisión: El láser permite fragmentar los cálculos con gran precisión, minimizando el daño a los tejidos circundantes.
¿Cómo se realiza el procedimiento?
La cirugía láser de cálculos renales se realiza bajo anestesia general o local, dependiendo del tamaño y ubicación del cálculo. Los pasos generales del procedimiento incluyen:
- Acceso: Se introduce un ureteroscopio a través de la uretra hasta alcanzar el cálculo.
- Fragmentación: Una vez localizado el cálculo, se utiliza el láser para fragmentarlo en pequeñas partículas.
- Eliminación: Las partículas fragmentadas pueden ser eliminadas de forma natural a través de la orina o, en algunos casos, puede ser necesario utilizar una canasta para extraerlas.
¿Cuáles son los beneficios de la cirugía láser?
- Recuperación rápida: La mayoría de los pacientes pueden retomar sus actividades normales en pocos días.
- Menor tiempo de hospitalización: En muchos casos, la hospitalización es mínima o incluso ambulatoria.
- Menor riesgo de complicaciones: La cirugía láser es un procedimiento seguro con un bajo riesgo de complicaciones.
- Alta tasa de éxito: La cirugía láser tiene una alta tasa de éxito en la eliminación de cálculos renales.